¿Qué es el chamanismo?
La palabra ‘chamán’, que proviene de la lengua tungus de Siberia septentrional, se ha difundido por el mundo desde el siglo pasado, aunque cada comunidad tradicional tiene un nombre para referirse a este especialista. En América, por ejemplo, los taíno le llaman behique, los wiráxika de México le nombran mara’káme, y el pueblo mapuche de Chile, machi.
El término chamanismo identifica un conjunto de actividades unidas por la intención de interactuar con otras esferas de la existencia humana. Los chamanes poseen la habilidad, adquirida después de un largo aprendizaje, de entrar en estados extáticos o de trance y por ese medio, acceder a modos alternativos de
conciencia y viajar por diferentes mundos. Es lo que los distingue de sacerdotes y personas místicas. El propósito del viaje del chamán es aprender, adquirir información que trae de vuelta para sanar, proteger a la comunidad de malos espíritus, adivinar y profetizar.
Los chamanes son maestros del éxtasis, el principal vehículo de su actividad. Son sanadores, videntes y visionarios. Para cumplir esta tarea son pintores, poetas, cantantes, danzantes, músicos y escultores. Están familiarizados con la naturaleza y la geografía que los rodea, con las plantas, los animales, la tierra, las estaciones y el clima. Son los depositarios de las tradiciones y la historia de su cultura.